El Grupo de Puebla considera que, dado el rol que jugó la OEA en las elecciones bolivianas de 2019, no se puede confiar en la organización como observador imparcial de elecciones a futuro.

DECLARACION
En vista de las últimas revelaciones en torno a las elecciones bolivianas de 2019, el Grupo de Puebla vuelve a insistir sobre el papel que desempeñó la Organización de Estados Americanos (OEA) en el desenlace golpista en Bolivia. Adicionalmente, el Grupo de Puebla denuncia que, recurriendo a argumentos falaces sobre un supuesto fraude electoral, el gobierno de facto de Bolivia intente perseguir a exfuncionarios bolivianos y proscribir al MAS en las próximas elecciones.

Frente a las nuevas evidencias presentadas en varios estudios técnicos y académicos, y reproducidas en importantes medios de comunicación, el Grupo de Puebla le solicitó al Consejo Latinoamericano de Justicia y Democracia (CLAJUD) que analice los diversos estudios sobre el proceso electoral boliviano y el rol desempeñado por la OEA en estos comicios. Sobre la base del análisis de los diferentes estudios, los miembros del CLAJUD “consideran imperativo que la OEA active sus mecanismos de control y auditoría interna para esclarecer los sucesos descritos [en el informe de CLAJUD], sin perjuicio de que la OEA pueda enfrentar las respectivas demandas ante órganos internacionales de derechos humanos”.

Llama la atención que el singular comunicado de Prensa del Secretario General Luis Almagro del día 16 de junio no responde a las inquietudes presentadas por los diferentes investigadores que analizaron las evidencias presentadas por la OEA. Más allá de sus groseras descalificaciones, no aporta elementos técnicos que puedan refutar lo demostrado en los diferentes estudios.

El Grupo de Puebla considera que lo acontecido en Bolivia pone en entredicho el rol de la OEA como observador imparcial de elecciones a futuro. Resulta imperativo que, como parte de la necesaria construcción de la integración latinoamericana, nuestra región establezca mecanismos regionales de observación electoral que sean técnicos, éticos, imparciales y respetuosos del derecho, como fue el Consejo Electoral de Unasur.

Considerando el rol jugado por la OEA en la ruptura democrática en Bolivia y en vista de las últimas actuaciones y declaraciones del gobierno de facto de Bolivia, el Grupo de Puebla:

1) Hace un llamado a los Estados miembro de la OEA y al Consejo Permanente de la organización para que exija que se realice una investigación exhaustiva de todo lo actuado por la OEA en el contexto del proceso electoral boliviano de 2019, y en consecuencia, se procure el restablecimiento de la legitimidad democrática en Bolivia.

2) Exige al gobierno de facto de Bolivia que cumpla con el cronograma aprobado por la Asamblea Legislativa Plurinacional de Bolivia para la organización de elecciones y cesen así, los intentos por impedir que el pueblo boliviano pueda elegir a sus gobernantes.

3) Exige a las autoridades judiciales de Bolivia que termine la persecución contra ciudadanos bolivianos en base a acusaciones de fraude que han sido ampliamente desacreditadas.

4) Exige al gobierno de facto y a las autoridades judiciales de Bolivia que abandone los intentos por proscribir al MAS sobre la base de falsas acusaciones de fraude.

Firmado el 29 de junio de 2020

  1. Ernesto Samper
  2. Guillaume Long
  3. Aloizio Mercadante
  4. Marco Enríquez-Ominami
  5. Alejando Navarro
  6. Carlos Sotelo
  7. orge Taiana
  8. Iván Cepeda
  9. Mónica Xavier
  10. Carlos Tomada
  11. David Choquehuanca
  12. Fernando Lugo
  13. Celso Amorim
  14. Carlos Ominami
  15. Esperanza Martínez
  16. Clara López
  17. Verónika Mendoza

 

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